-
Créeme lo que voy a contarte, porque es real, quizás pienses que fue mi
imaginación pero si realmente crees que puedo ayudarte es esencial que confíe –
dijo Leona a su amigo Felipe.
Leona conocía a Felipe desde sus primeros años,
sus padres siempre fueron muy amigos, y crecieron prácticamente juntos,
concurren al mismo colegio y suelen jugar y hablar cuando sus padres se juntan
a cenar.
-
Dale
Leona contame!!
-
La
cosa es así, yo hasta hace unos meses le tenia mucho miedo a la oscuridad, si o
si tenia que mantener la televisión prendida hasta el siguiente día. Pero un día
decidí que no quería más tener miedo, y hable sola conmigo, en voz alta, y al
otro día alguien me hablo.
-
Guauu,
pero de que hablas Leona? Quién te hablo?
-
Asi
como lo escuchas Feli, me hablo una voz muy suave y alegre. Era la lucecita del
televisor.
-
Daaale,
no me mientas!! Mira que yo siempre te creí todo…
-
Feli
te digo la verdad, así fue, me dijo que había escuchado lo de la noche anterior
y que podía ayudarme a dejar de tener miedo y así fue, ya no tengo miedo. Y
desde ese día que no tuve más miedo, desapareció. No la escuche nunca más. La
extraño pero me enseño algo que no voy a olvidar nunca. Si me crees puedo
ayudarte con tu miedo, si no me crees es muy probable que al creer que soy una
loca no escuches nada de lo que te digo.
-
Leo,
siempre fuimos amigos! Y creo que es muy raro lo que decís, pero te creo. Y si
quiero que me ayudes!!!
-
Gracias
Feli, contame que te anda pasando, contame!
-
Estos
días volví a tener miedo a estar solo, mi hermano se fue de mis abuelos y quede
solo en mi habitación, y sentí mucho miedo. Me sentí solo, pequeño, asustado.
-
Ese
tipo de miedos creo que hasta los adultos lo tienen, no? A veces tengo ese
miedo, estoy sola mirando televisión, o sola jugando con mis muñecas y cuando
me doy cuenta de eso, miro a mi alrededor y me viene el miedo, ese miedo de
saber que estoy sola.
Leona sabia que ese miedo es uno de
los miedos con los que más luchan niños y adultos, a nadie le gusta sentirse
solo, nadie quiere estar solo, procuramos siempre estar para compartir momentos
con nuestros seres amados, somos seres sociables, quien pensara que estar solo
es la salvedad, tarde o temprano sabría que eso es un error, necesitamos del
amor, de la comprensión, de la sonrisa compartida, necesitamos de un abrazo.
-
Si,
todos tenemos ese miedo, pero en la noche cuando estoy solo me cuesta más, me
da miedo estar solo. Y ya estoy grande para llevar el colchón a la habitación
de mis padres – risas de Felipe.
-
Feli
te voy a dar mi secreto, para los días de tristeza sonrío fuerte y canto. Para
los días que tengo miedo a la oscuridad recuerdo la voz de mi amiga lucecita y
para cuando tengo ese miedo a estar sola, me acuerdo que nunca estoy sola. Que
son momentos, que tengo a mis padres, a mis primos, a mi perro, a mis amigos.
Que nunca estamos solos.
-
Suena
muy fácil, si que si!
-
Sii,
suena fácil, pero así como suena también puede ser. Feli los miedos siempre van
a estar presentes, y más ahora que somos chicos, o capaz que de grandes son más
grandes. A veces veo en la televisión que los adultos son los superhéroes, pero
también veo que lloran, que sufren y que tienen miedos.
-
Si,
yo también lo veo. Y lo veo en mi hermano Luis, que ya vive solo y a veces lo
vi llorar, el no lo sabe. Pero si, es como vos decís siempre vamos a tener
miedos.
-
Claro
que si! Y cuando sentí mucho miedo a la oscuridad, solo me quede a oscuras y me
di cuenta que en algún momento iba a poder ver, que de a poco la luz aparecería.
Y lo mismo cuando estoy sola, aparece mi mami para avisarme que esta la cena o
mi padre para jugar conmigo.
-
Al
final nada es lo que parece! Gracias Leona, me voy acordar de vos cuando sienta
miedo de estar solo. Sos mi gran amiga!
-
Al
final nada es lo que parece Feli, no tengas miedo, yo siempre voy a ser tu
amiga!
Leona abrazo a Felipe, y los dos
sonrieron, muchas veces los miedos nos paralizan, nos asustan, nos dejan
parados en lugares desconocidos. Creemos que los miedos son los que frenan los
caminos y solo somos nosotros que permitimos que eso suceda, cuando la
oscuridad este presente solo hay que mirar más allá, para poder ver la luz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario